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lunes, 8 de enero de 2018

Reflexiones de Filosofía del Derecho sobre el Auto del TS que niega la excarcelación de algunos catalanes




Adjuntamos imagen del resumen del Auto del Tribunal Supremo (ponente, Magistrado Miguel Colmenero) que resuelve no excarcelación de implicados en la declaración de independencia de Cataluña; resumen impecable realizado por la Agencia EFE, que subrayamos sobre lo publicado por      https://www.invertia.com/es/-/el-supremo-rechaza-el-recurso-de-junqueras-y-no-deja-que-salga-de-la-carcel?inheritRedirect=true

     El Auto nos parece sólidamente fundado, y nadie, jurídicamente serio, cabría que hubiese pensado, como posible, otra resolución.
    
     Sin embargo, nuestro modo de ver el asunto es algo diferenciado.

     No es que discrepemos en algo de Colmenero, no.

     Es más: como Ldos en Derecho, fuimos, creo --conforme puede verse en     https://peso-press.blogspot.com.es/2017/09/urnas-opacas-para-pucherazo-de-una.html , si se quiere--  los primeros  en calificar esas actuaciones  de, como mínimo, inducción a la rebelión y sedición, tal como se indica en el Auto que comentamos.

     Lo cual no obsta --si se nos permite-- hacer las siguientes reflexiones de orden intelectual:

    1/ El Obispo de Solsona --jovencito de quien NO nos costa que sea Ldo. en Derecho y, en todo caso, lo que demuestra es que poco o NADA sabe de Dcho Internacional o de Teoría del Estado, y muy poco de Filosofía del Derecho-- pese a esto, vino a decir una verdad en su homilía del 5 nov 2017  --véase, si se quiere, referencia en   https://www.dolcacatalunya.com/2017/11/vea-oiga-desbarrar-al-obispo-novell-misa-no-justo-los-golpistas-esten-la-carcel/ --.  Más o menos algo así como que “algo puede ser legal, pero eso no impide que pueda ser injusto.

        Efectivamente: el ‘positivismo’, es decir, el mirar qué dice la ley o las leyes como regla o modo de saber lo que, según esas leyes, es bueno o malo…, es una barbaridad mental que, de hecho, ha llevado a tiranías tan salvajes como la hitleriana que adoctrinaba a niños desde que nacían, lavándoles de este modo su cerebro y mediatizándoles así insalvablemente su comportamiento a beneficio, quizá exclusivo, del que ¡por eso! les adoctrinaba... (como, por cierto, también ha hecho el catalanismo)

        Es una barbaridad, y es tonto: porque parece creer que algo que sea contrario a la condición humana, pueda dejar de serlo con sólo legislar que no lo es, y repetirlo masivamente.

        Por tanto, es cierto que, con sólo decir que algo es ‘legal’  (o sea: que viene recogido en una ley y obligado por ella),  con sólo eso --según bien decía el de Solsona--, NINGUNA certeza nos da TODAVÍA de que sea justo o no.

        Estamos, pues, de acuerdo en que una ley, por mucho que sea ley aprobada ‘legalmente’ (¡curiosa ‘petición de principio’,  el querer demostrar algo, pero presuponiendo que, por aprobado ‘legalmente’, ya ‘tiene que ser’ verdad!),… ya vaya a ser, sólo con eso, algo ‘justo’.

    2/ Por consiguiente, el argumento de haber infringido una ley, no bastaría todavía --en puro rigor filosófico--  para ‘castigar’ al infractor: habría que analizar, además del ‘qué’ ha infringido, el ‘cómo’ y el ‘porqué’ lo ha hecho.

        Y es cabalmente en esto último,… en lo que los conspiradores catalanes se han ganado  --con todísima razón ahora, según nos parece--  la cárcel con valor de un escarmiento ejemplar.

        Completaremos aquí, pues, el argumentario del TS anotando que si alguien se rebela contra una ley, no es punible tanto por que la incumpla  --que viene a ser de pura coherencia que lo haga--, sino por ¡el porqué! se rebela y ¡cómo! se rebela.

        Y en repuesta a estas dos últimas preguntas, bien se ve que los ‘conspiradores’ independentistas SÍ QUE son rotundamente punibles. Por lo siguiente:

    3/ La legitimación para rebelarse sólo proviene de lo injusto que sea aquello contra lo que nos rebelamos.

         Pero ¿cómo determinar qué es lo que sea justo o, por el contrario, ¡insufriblemente! ‘injusto’?  Entramos con esto de lleno en el terreno de la Filosofía del Derecho, que trataremos de aclarar resumidamente.

    4/ Así sucede que si asumiésemos la teoría ‘positivista’ del extinto Peces-Barba --cuyo supuesto ‘socialismo’ parece que mayormente se tradujo en ostentar altos y pingües cargos en todo cuanto pillaba--; Peces-Barba, que ‘enseñaba’ en su cátedra que era ‘de Justicia’ cuanto estuviese recogido en una ley --teoría que dio pábulo y respaldo al nazismo y a cuantos otros Nerones en el mundo han sido--,… ¡NUNCA! podríamos rebelarnos contra esos tales ni contra leyes que atropellasen cualquier sensata convivencia…
   
        Tan repulsivo ‘positivismo’ vino a ser paliado, en parte, por la prestidigitación mental que propuso John Rawls  (1921-2002), el cual dijo que la fijación de qué sea ‘verdad’, y su corolario de qué seala Justicia’, provendrá del mero ‘acuerdo que un grupo supuestamente ‘imparcial’ adopte en cada momento… Y fijaba la ‘imparcialidad’ en que el grupo acordante, para alcanzar ese ‘consenso’,  hubiese partido de ser ¡todo lo ignorante! que se pudiese ser sobre el tema que iban a consensuar…

        Pero es evidente que, con este pintoresco planteamiento, Rawls sólo estaba demostrando su obvia y también  total ignorancia  de la teoría matemática de la ‘información-como-magnitud-contraria-a-la-incertidumbre’, vulgarmente dicha ‘información-para-evitar-el-caos’ (como cuando se ponen semáforos en los cruces, para que no haya choques), o técnicamente llamada negentropía (en lenguaje de la Termodinámica). (¡Ah, pero …!: ¿Termodinámica hemos dicho? Pues materia ésta, sin duda, que excedía con creces la capacidad intelectual de Rawls… ¡Qué lástima!)

        Consecuencia de lo propugnado por Rawls sería que si, en un momento dado, un grupo (una población)  --¡y mejor aún si parten de ser absolutamente ignorantes sobre lo que van a decidir!-- se pone de acuerdo para darse unas reglas de juego de convivencia…, ¡genial: YA NADIE!, por mucho que fuesen unas reglas ‘inhumanas’ --el nazismo como ejemplo otra vez-- podrá rebelarse contra eso… que…, por el mero ‘consenso entrecruzado’ (en expresión de Rawls) alcanzado, ya había pasado a ser ‘la verdad’ y ‘lo justo’… ¡irremisiblemente!

        Bien se ve que esto TAMBIÉN es una memez, y TAMPOCO nos sirve.

    5/ La cuestión crucial estará pues, repetimos, en qué tomaremos porjusto’ o, por el contrario, el qué, como ¡ya insufriblemente! injusto. Y, para ello, ya hemos visto que ni siquiera Rawls  --el sucedáneo del ‘contrato social’ rousseauniano--  nos sirve.

        ¿Nos basaremos  entonces, quizá, en los ‘Derechos Humanos’?
  
        Pero, entonces…, ¿cómo saber cuáles son estos ‘Derechos? ¿Simplemente los que hayan ‘acordado’ que sean, unos señores reunidos en una sala de Conferencias en 1948? Porque ¡vaya!: entonces volvemos a Rawls, y nos estamos volviendo otra vez ‘esclavos’ de lo que, en un tiempo y para un lugar concreto, decida un grupo de doctos capitostes… por el simple hecho de que hayan llegado a un acuerdo entre ellos… (Pues ¡tampoco nos gusta!)

        Nosotros proponemos volver la vista a la cosmología, la biología y la filosofía y, escudriñando en sus saberes, ir en busca --¡cada vez mejor y más completa; desde luego!--; en busca de los ‘valores’ que definen al ser humano  diferenciándolo  del resto de seres del Universo … ¡Universo en el que estamos y del que también somos parte…!.

       Así SÍ: así podremos ir PROGRESANDO Y COMPLETANDO  el conocimiento’ de esos ‘valores’ y las CONSECUENCIAS de ellos que respetar TODOS y para TODOS.
 
        ¡No es --¡por favor: no!--  que definamos  nosotros, ¡‘porque sí’! (“lo que nos plazca”), lo que nos pongamos de acuerdo en decir que ‘es eso’ y no otra cosa…! ¡No!.

        Lo que es, es (…aunque nosotros ‘acordásemos ‘ que ‘no’ es). A nosotros sólo nos cabe ir DESCUBRIENDO ¡‘lo que es’!..., cada vez más y mejor, y sacándole más diversas consecuencias… ¡Esto sí! Pero esto es cosa conceptualmente ¡bien distinta! a lo del positivismo de “es lo que me da la gana”, o al contractualismo de “es lo que acordamos que sea”.

        ¡No!. ¡NADA nos ‘inventemos’! Sólo vayamos descubriendo y asumiendo más y mejor lo que YA ES, lo que YA ESTÁ ahí… ¡Ésta es la cuestión!

    6/ Centrado el asunto de este modo, pasemos ya al punto siguiente: ¿cuáles son los Derechos CONSUBSTANCIALES con los valores humanos específicos, es decir: con la ‘condición humana’?

        El primero de todos, evidentemente, es el respeto a la vida y la integridad ‘total’ –es decir: psicosomática--  de cada persona.

        De lo cual derivarán otra serie de Derechosconsecuentes’…, que serán los necesarios para ‘asegurar el de la vida e integridad  ya mencionados. Como lo es, v.gr., el Derecho a ser INFORMADOS … ¡lo bastante! como para  crecer  en sabiduría… ¡en todos los campos!, y saber desenvolvernos ¡cada vez mejor! (más eficiencia; menos efectos secundarios nocivos…)
 
        Con un importantísimo e inalienable corolario: el Derecho a que toda información  --escolar, académica, profesional, social, psicológica, de lo que ocurre y cómo nos afecta, etc--  respete SIEMPRE  el Principio de VERACIDAD.

        Podríamos decir que no hay delito de mayor ‘lesa humanidad’ que ¡el mentir! a quien demanda información. ¡Sea la que sea, y de lo que sea!

      ¿Por qué? Porque ésta se convierte en la PREMISA indispensable para reducirrealmente (no, ficticiamente) las incertidumbres  de futuro. De modo que SÓLO ASÍ podremos asegurarnos que sea posible y  eficiente  la CONVIVENCIA, la cual implica siempre un ‘devenir’ en el tiempo: devenir que ‘todavía’  ¡NO conocemos!,  pero que podremos prevenir: por ejemplo, si acordamos algo con alguien y nos consta la fiabilidad de ese alguien, podremos predecir todos los comportamientos y efectos relacionado con ese acuerdo…

         Y Derecho a la ‘Convivencia’, que es CONSUBSTANCIAL con la condición humana: pues siendo los humanos seres MUY limitados en nuestras posibilidades, necesitamos COMPARTIR  e intercambiar cada uno lo nuestro con otros… como único modo plausible de ‘prosperar’ ¡TODOS! (y no sólo los avispados que actúen como ‘avispones’…)

        De modo que si EL PRIMER Derecho Humano es el del mutuo respeto de la vida e integridad de cada, el inmediato e inevitable corolario de éste será EL SEGUNDO más importante Derecho CONSUBSTANCIAL a la condición humana: el de CONVIViR  en  PAZ y provecho recíproco.

        Y si del primero ya se seguía la rigorosa exigencia del respeto a LA VERDAD, resulta que TAMBIÉN de este segundo --el Derecho a la Convivencia--  se desprende igualmente imperioso el mismo respetar SIEMPRE la Verdad.

        Verdad que es , desde luego, ¡imprescindible! para convivir… ¡EN PAZ!. Y Paz sin la que ¡ninguna! ‘convivencia podría sobrevivir.
        Pero PAZ que tampoco sobreviviría si NO se atiende a la más estricta JUSTICIA distributiva y retributiva.
                                                                       
       Aunque ninguna Paz, ni Justicia, ni --por tanto--  Convivencia, ni  --entonces--  ¡tampoco! siquiera el respeto a la vida se aseguraría  si… NO se reconociese igual y simultáneamente el Derecho Fundamental a la SOLIDARIDAD con que abrirnos a COMPARTIR y a la MUTUA ayuda

        (Y así podríamos seguir detallando TODOS  los auténticos Derechos Humanos Fundamentales que deberemos RECONOCER que existen, y RESPETAR y hasta apoyar y PROMOCIONAR).

    7/ Dicho lo cual, ya estamos en condiciones de advertir contra cuáles leyes sí, y cuáles no, podremos  --querido Obispo de Solsona: ¡a ver si se entera usted, hombre!--  rebelarnos’,… y ‘cómo’  hacerlo  (incluso, llegado el caso, infringiéndolas; desde luego).

      Que… los conspiradores del independentismo catalán ¿no se han enterado, todavía, cuáles sean, y ‘cómo’ hacerlo?

        ¡Pues parece bien claro…!: SÓLO puede uno REBELARSE  --y en esto creo que coincido con el bueno de Sto. Tomás de Aquino, querido solsonés--  contra leyes que atenten contra los Derechos Humanos Fundamentales y sus relacionados: como el Derecho a la Libertad de ‘íntima’ decisión, el Derecho al propio e ‘íntimo’ Pensamiento y Creencia, el Derecho a Expresarnos si lo hacemos dentro del más ESCRUPULOSO respeto a TODOS los Derechos de los demás  --incluido el Derecho a recibir  la Verdad y sólo  la Verdad…--, etc.

    8/ Y en cuanto al ‘cómo’, lo primero y más fundamental de todo es… ¡con la VERDAD, y sólo la VERDAD por delante..!

        Y este imprescindible requisito es el que ha quebrado y brillado por su ausencia pavorosamente en los ‘conspiradores’ catalanes.

    9/ Y sucede, dentro de esta exigencia de JAMÁS mentir, sino SIEMPRE decir lo que es VERDAD comprobable y comprobada,  que también JAMÁS --repetimos-- JAMÁS se puede acoger como Derecho Humano el de auto-determinaciónpara hacer lo que nos dé la gana, tanto individual como grupalmente. Porque  --respetado Obispo--, de aceptar esta idiotez, estaríamos abocándonos al CAOS más absoluto e ineficiente, injusto, salvaje, brutal, e …¡INHUMANO precisamente!

        Y así como el LÍMITE DE LAS LEYES radica en que las restricciones ¡que imponen!  a la libertad de actuar,  ¡deben! estar REQUERIDAS para  mantener la  ‘DEFENSA PROPIA’ de LA CONVIVENCIA eficiente en Justicia, Paz, Solidaridad, y todo lo demás…    (véase, si se desea,   http://peso-press.blogspot.com.es/2009/12/el-limite-de-las-leyes.html ) ;

ASÍ TAMBIÉN  el propio ejercicio de los Derechos Humanos  --incluido el de libertad--  tiene como límite  la preservación, respeto y aun apoyo  de  LA VERDAD, la Justicia, Paz, Convivencia, Solidaridad, y el etc. de los Derechos Humanos DE TODOS los demás.

        Para lo cual, venimos OBLIGADOS a cumplir TODAS las leyes que también los respeten. ¡Gusten o no gusten!

        Y es una obviedad que la Constitución Española  ¡LOS RESPETA!  Ergo… ¡HAY QUE CUMPLIRLA!

        Es decir (para que nadie diga que no se nos entiende): hay que cumplirla… ¡no, porque sea ‘una’ ley vigente!; sino que hay que cumplirla porque  LA REBELIÓN SÓLO  está legitimada contra leyes que atropellen FLAGRANTEMENTE  Derechos Humanos. Y esto NO SUCEDE con la Constitución Española.

        Decir lo contrario es lo que es un flagrante atentado contra el Fundamental Derecho de "SIEMPRE decir LA VERDAD y sólo LA VERDAD".

       Y Derecho Fundamental  éste  (el decir siempre LA VERDAD y nada más que LA VERDAD; repetimos) en y para  la Convivencia  --convivencia  que es, recordemos,  CONSUBSTANCIAL  con el Derecho a la Vida y a la Integridad--, y que además ES REQUISITO IMPRESCINDIBLE DE CUMPLIR, para legitimar cualquier ‘rebelión’.

    10/ Lejos --¡muy lejos!-- de cumplir con este requisito de VERACIDAD, los conspiradores catalanes  --según reiteradas ‘confesiones’ recientes de ellos mismos--  se han dedicado desde hace décadas a ENGAÑAR  (nos remitimos, por ejemplo, a    https://peso-press.blogspot.com.es/2015/10/recidiva-trasnochada-de-nacionalismo.html ,    o también      https://peso-press.blogspot.com.es/2013/09/el-tremendo-engano-y-atropello-de-mas.html )

        Pero sucede que ENGAÑAR  a otro para inducirle  o –lo que es más perverso aún-- seducirle a que haga algo que le perjudica  --pero que beneficia al engañador--,  y que de ningún modo habría hecho si no hubiese sido engañado, es ESTAFA.

        Y estafa, además, ‘MASIVA’.  Con abuso de posición dominante y fraude de la confianza recibida. Y destruyendo toda defensa intelectual de sus víctimas, bombardeadas continuamente con adoctrinamiento mediante mentiras escogidas.
  
        Pues esto, precisamente esto, es lo que han venido haciendo durante años quienes, aspirando a su propio y enloquecido protagonismo aun a costa de la ruina de todos los demás, han venido también poniendo todo su empeño en arrastrar a ignorantes, ingenuos, o –por el contrario--  pillos ‘pescadores en río revuelto’, a la sedición y la rebelión.

    11/ La única ‘autodeterminación’ que nos cabe y nos compete a cada cual es en el elegir cada día, cada segundo y en cada instante,… entre ser honestos o deshonestos. Con los demás y con nosotros mismos.

        Y la primera vara de medir la HONESTIDAD radica en ver si somos VERACES, o engañamos: a los demás, y a nosotros mismos.    
        Porque, en esto, o jugamos todos, o nos vamos al garete… ¡también todos!

(Recordemos, una vez más, las acertadas palabras de Mijail Gorbachov, convergentes  --por cierto--  con las de S. Pablo, que pueden consultarse, v.gr., en    https://peso-press.blogspot.com.es/2017/12/del-expolio-que-cataluna-ha-venido.html )

    12/ Concluimos, en fin, nuestra contribución al argumentario del Auto del TS del que fue ponente  el Magistrado Miguel Colmenero:

        El gravísimo delito de  --casi diríamos; según lo arriba expuesto--  ‘lesa humanidad’ que entendemos cometido obviamente por los conspirados catalanes  (aunque del que nadie parece haberse percatado y, desde luego, menos aún haberles acusado), ES  el de haber  FALTADO A LA VERDAD como forma de ESTAFA MASIVA por la que incitaban a SUBLEVARSE contra una legalidad vigente que EN NINGÚN CASO era agresora de los Derechos Humanos que, existiendo conforme a la naturaleza humana, han sido ya Declarados por las Naciones Unidas en 1948 y complementados sucesivamente por otros Protocolos Internacionales que ¡SIEMPRE! EXCLUYEN su interpretación EN CONTRA  de ellos mismos  --como manifiestamente sería invocar un FALSO ‘derecho de autodeterminación’ para infringir abiertamente el Derecho a la Solidaridad  que a todos incumbe, y el Derecho a que TODOS cumplan las leyes (según lo arriba expuesto) en cuanto que con ello se está ejerciendo la legítima ‘DEFENSA PROPIA’ de todos los intereses, igualmente legítimos, de TODOS los ciudadanos--.

Sólo cumpliendo las leyes legítimas, cooperamos a la DEFENSA  de TODOS, incluidos los que más necesitan de nosotros.

¿Qué clase de ‘Derechos Humanos’ es eso de “coge el dinero, y corre”?


Prof. Dr. Fernando Enebral Casares



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